Ya hemos comentado en entradas anteriores que SOA propone que los procesos de negocio no se traduzcan en aplicaciones clásicas, sino que éstos llamen a los servicios que necesitan para obtener resultados.
Los servicios en los que se basa esta arquitectura pueden estar ejecutándose en la propia organización, o por el contrario, pueden contratarse a proveedores de software externos que cobran por su invocación (Software-as-a-Service o SaaS)
Pero en cualquier caso, la reutilización de código es importante, al igual que la flexibilidad del software programado con esta filosofía y las posibilidades de actualización.
La arquitectura de referencia SOA plasma los distintos componentes de una solución SOA, principalmente, los procesos de negocio y los servicios. Además muestra como interactúan estos componentes con los usuarios de negocio, y con los sistemas existentes en la organización.
En los últimos tiempos, las arquitecturas de referencia suelen incluir un tipo concreto de servicio denominado Data Service y que permite llevar a cabo una reutilización de código todavía mayor. Un Data Service permite a los procesos de negocio acceder y manipular los objetos de negocio que manejan los servicios SOA.
Es decir, este tipo de servicios proporcionan un conjunto de operaciones que encapsulan las diferentes maneras de acceder a los objetos de negocio de un tipo determinando, haciendo de interfaz entre los consumidores de un servicio y éste.
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